Historia médica
Su médico le hará preguntas para entender mejor sus riesgos. Por ejemplo le preguntará sobre:
- Su edad
- Su género sexual
- Si usted es mujer, le preguntará si está en la menopausia
- Si se ha roto huesos como adulto
- Si tiene familiares que han tenido huesos rotos y osteoporosis
- Si fuma o bebe
- Sobre su dieta de comidas, si come alimentos ricos en calcio y en vitamina D
- Si hace ejercicios físicos y sobre su actividad física en general
- Si usted ha tenido alguna vez, trastornos alimenticios como por ejemplo, la anorexia
- Si usted no está en la menopausia, su médico le preguntará si sus períodos menstruales son regulares
- Si usted es un hombre, su médico averiguará sobre sus niveles de testosterona
- Si usted toma algún medicamento o tiene alguna condición médica que pueda causar pérdida de hueso
Examen físico
Su médico evaluará si usted ha perdido altura y examinará su columna vertebral.
Después de los 50 años de edad, su médico debe revisar su estatura sin zapatos, cada año.
Pruebas de laboratorio
Las pruebas de sangre y de orina pueden usarse para identificar las posibles causas de pérdida ósea. Algunas de estas pruebas pueden ser para evaluar:
- Niveles de calcio en sangre
- La presencia de calcio en la orina de 24 horas
- La función de la glándula tiroides
- Los niveles de la hormona paratiroidea
- Los niveles de la testosterona en los hombres
- El examen de 25 – hidroxi vitamina D para determinar si el cuerpo tiene suficiente vitamina D
- Las pruebas de marcadores bioquímicos, tales como NTX y CTX
Algunas de estas pruebas pueden ayudar a identificar si usted tiene otra condición médica que esté causando la pérdida ósea. En ese caso, esto se llamaría osteoporosis secundaria. Dependiendo de sus síntomas y otros factores de riesgo, su médico quizás quiera hacer otras evaluaciones para averiguar que podría estar causando la pérdida ósea. Si usted tuviera otra condición de salud que esté causando la pérdida de hueso, el tratamiento de ese problema de salud ayudará a su salud ósea general.
Otros exámenes para evaluar la salud de los huesos
Las pruebas de los marcadores bioquímicos de la sangre y/o de la orina, pueden ayudar a calcular la rapidez en la que su organismo está perdiendo o construyendo hueso. Las radiografías y las evaluaciones de fracturas vertebrales (VFAs, por sus siglas en inglés) pueden mostrar roturas en la columna vertebral.
La escanografía nuclear de huesos, las tomografías computarizadas o las resonancias magnéticas pueden mostrar cambios que pueden ser causados por el cáncer, lesiones óseas, inflamación, nuevos huesos rotos u otras condiciones de salud. Frecuentemente, se utilizan estos exámenes para ayudar a encontrar la causa del dolor de espalda o para hacer el seguimiento de las anormalidades que podrían verse en una radiografía.
El FRAX examina la edad de una persona, la densidad ósea y otros factores de riesgo para calcular la probabilidad que esa persona tendría de romperse una cadera u otro hueso importante dentro de los próximos 10 años. Si usted tiene baja densidad ósea, su informe DXA puede incluir su puntaje FRAX junto con su densidad ósea. También, su médico puede averiguar su puntaje FRAX usando una versión basada en el Internet. Es importante que sepa que el FRAX es una herramienta que puede utilizarse para guiar las decisiones sobre el tratamiento en las personas que cumplen las siguientes tres condiciones:
- Hombres de más de 50 años y mujeres postmenopáusica, de 50 años o más
- Personas con baja densidad ósea (osteopenia)
- Personas que no han tomado un medicamento para la osteoporosis
Los medicamentos para la osteoporosis se recetan para reducir el riesgo de fracturas de los huesos. NOF le aconseja que converse con su médico acerca de sus opciones de tratamiento, de los riesgos y beneficios de tomar un medicamento específico, incluyendo los posibles efectos secundarios que ese medicamento pueda traer.